lunes, 24 de octubre de 2011

Mi motor


Hoy me desperté algo desubicada. No sabia muy bien que era real y que no. Mientras veía las fotos de la pared de mi habitación sentía que no pertenecía a ningún sitio, ya no. Daniela dormía y yo deseaba seguir durmiendo...
Hay semanas que resultan mas difíciles que otras y el tener una enana que no para no ayuda demasiado. Aunque tiene muchas cosas buenas y la mejor es cuando te abraza para que no la sueltes... Y la dejo en la guardería y me da un beso antes de irme y me sonríe... Es el motor de mi vida. En todos los aspectos, para lo bueno y para lo malo, pero es mi motor.
Hoy, Carlos, soñé que seguías en coma. Iba al hospital a verte y te cantaba, como hacía siempre. De repente, un día despertaste. Despertaste. Y yo me alegraba y a la vez sentía el miedo de no saber si estabas bien. Pero despertaste... a la vez que desperté yo. Miré nuestra habitación y me sentí descolocada. Me vino la imagen de cuando me quedé llorando apoyada al cristal que me separaba de tí. Estaba desubicada... Me senté en nuestra cama y miré las fotos de la pared y sentí que ya no pertenecía a ningún sitio. Mi amor, sin tí siento que ya no pertenezco a ningún sitio... Daniela está preciosa, no crees mi vida? Es tan bonita, la quiero tanto… Es el motor de mi vida...
Te quiero, te quiero siempre... Te quiero hasta la luna y vuelta...